Conforme pasan los años en la red, uno elabora su menú personal. Páginas de literatura y pintura, sitios lúdicos, redes sociales y demás han sido clasificados en entradas y entremeses, platos fuertes, postres y bebidas. Nuestro menú se ajusta a nuestra "ingesta calórica intelectual".
A veces, con un poco de suerte, el chef invisible que habita en los servidores del mundo nos ofrece la Soup de Jour (sopa del día). La probamos. Su sabor reconforta y sorprende.
La ilustración Soup de Jour ahora es una sopa más en mi menú virtual. Vayan y saboreen el trabajo de Kristin Tercek, una auténtica delicia.
2 comentarios:
¡Exquisito! (en más de un sentido)
Estaba preparando mi menú y me ha caído muy bien lo de Tercek para completarlo.
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