sábado, 1 de enero de 2011

Cabañuelas y 2011


Algunas abuelas hablaban de las cabañuelas, así ocurría con la de Libia y con la mía. Al iniciar el año, durante los primeros doce días de enero, verifico el clima. Imagino entonces que así será en tal o cual mes del año. Pero cuando el año transcurre y los días se agolpan olvido por completo mi predicción.

Hoy, primero de enero, el día amaneció nublado. Al abrir la ventana la humedad entró de golpe. La sequía siempre me provoca desasosiego, la promesa de lluvia me parece más luminosa que el sol sobre el cielo despejado. Me tranquiliza que, según las cabañuelas, enero será un mes frío y húmedo, de lloviznas tímidas. Entonces decidí anotar los primeros doce días de enero y su clima en este blog. Dejarme de olvidos:

Día 1 (Enero): frío y húmedo, de lloviznas tímidas.
Día 2 (Febrero):
Día 3 (Marzo):
Día 4 (Abril):
Día 5 (Mayo):
Día 6 (Junio):
Día 7 (Julio):
Día 8 (Agosto):
Día 9 (Septiembre):
Día 10 (Octubre):
Día 11 (Noviembre):
Día 12 (Diciembre):

En realidad no me importa si mis pronósticos llegan a buen término, aunque creo que las predicciones son maleables. Me interesa conservar la magia que presentía en las palabras de mi abuela; la misma magia que materializo a la mínima provocación como única posibilidad de asir este mundo. O tal vez todo es un pretexto para escribir. Y todo lo anterior es la exhibición de mi ocio. Ojalá todos tengan magia y pretextos y ocio para este año 2011.

No hay comentarios.: